UNAS ALEGRES NAVIDADES
Hoy Ana se encontraba triste y deprimida. Había ido al médico y le habían diagnosticado una grave enfermedad. Se preguntaba que por qué tenía que pasarla a ella precisamente algo tan cruel.
Intentó no pensar en esas cosas y se puso a imaginarse algo alegre y positivo.
Ya sé, se dijo a sí misma, como estamos en Navidad voy a preparar el ambiente navideño escuchando villancicos.
Las canciones navideñas se escuchaban en la habitación. Poco a poco el ánimo de Ana cambió de un estado pesimista a un estado optimista y se dispuso a entonar con alegría la música.
Llegó la fecha de los Reyes Magos y Ana pidió salud para todo el mundo. Bueno, pensó, al fin y al cabo no tengo por qué desmoralizarme, todo saldrá bien.
Pasadas las Navidades, acudió a la cita con el Doctor y la comunicaron que las pruebas estaban equivocadas y que no padecía ninguna enfermedad.
Ana se encontraba entusiasmada. Gracias a Dios, pensó, no volveré a ser tan egoísta con los demás y a preocuparme tanto por mí misma.
El año transcurrió con mucha rapidez y el llegar de nuevo las Navidades Ana quiso dedicarse a los demás y se fue a Lourdes para ayudar a los enfermos y dar gracias a Dios que la había ayudado tanto.
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